En caso de que te interese pasar por el quirófano por coquetería, un especialista nos brinda algunos consejos para llegar a esa instancia quirúrgica más preparada y con la información necesaria.
Cada vez más mujeres deciden pasar por la experiencia quirúrgica para paliar la acción del tiempo, o bien moldear aquello que se desea ‘a medida’. Y, lo sabemos: toda cirugía tiene riesgos.
En esta nota Martín Moyano Bradley, especialista en Cirugía Plástica y Reconstructiva y director del centro médico Estética Buenos Aires, brinda algunos consejos esenciales, que son de gran utilidad para tomar esa iniciativa con la prevención necesaria.
Paso a paso, estas son las consideraciones generales:
En primer lugar, es fundamental buscar referencias tanto del profesional seleccionado como del centro médico en el que trabaja, idealmente con personas que hayan sido intervenidas en esa institución.
Averiguar si la clínica donde se desempeña el cirujano atiende obras sociales o prepagas importantes: ello significa que pasó por muchas auditorías exigentes en cuanto a la trayectoria, calidad de las instalaciones y al profesionalismo.
El cirujano tiene que conocer y poder realizar la misma cirugía a través de distintas técnicas, identificando cual es la más adecuada según las características de cada paciente.
La operación debe efectuarse en un contexto y entorno de máxima seguridad. Por ejemplo, tiene que haber un monitoreo cardiológico, un anestesista, idealmente dos cirujanos, dos instrumentadoras y la utilización de materiales estériles.
El lugar donde se llevan a cabo las cirugías debe estar debidamente habilitado por el Ministerio de Salud de la Nación.
El cirujano no se tiene que manejar exclusivamente con una marca de insumos ya que podría estar viciado comercialmente. Si bien puede tener preferencias por alguna, en base a características técnicas, debe ofrecer la posibilidad de utilizar todo lo que se encuentra disponible y aprobado en el mercado.
Es fundamental saber que se usan materiales de buena calidad. Por ejemplo: en el caso de las prótesis mamarias, el paciente debe solicitar el certificado de implante y la tarjeta de garantía de las prótesis.
Respecto de la anestesia, salvo en intervenciones complejas, conviene evitar la anestesia general. Con una sedación y anestesia local se disminuyen los riesgos y se agiliza la recuperación.
Si se quisieran realizar más de un procedimiento, por ejemplo abdominoplastia e implante mamario, la recomendación es que se realice en dos tiempos quirúrgicos, con al menos 15 días de separación entre uno y otro; si no fuera una posibilidad, entonces la cirugía deben llevarla a cabo dos equipos médicos, o sea 4 cirujanos.
Desconfiar de los lugares o avisos que prometen una cirugía a un precio demasiado económico que ni siquiera cubre el costo básico.
También es muy importante que el paciente sea sincero en la charla con el profesional y que sepa a qué se está sometiendo ya que eso garantiza un buen resultado
Fuente: losandes.com.ar