Blog

Actualmente existe una serie de procedimientos médicos que usan especialmente los cirujanos plásticos y cirujanos cosméticos para mejorar la estética de las personas. Pero lograrlo a partir de la mezcla de su propia grasa con células madre es mucho más innovador y efectivo, porque no sólo sirve para rejuvenecer la piel del rostro, sino también ayuda a reponer el volumen y la forma que se ha perdido en ciertas zonas del cuerpo con el paso del tiempo como el rostro, mamas, glúteos, manos, pantorrillas, entre otras.

El hematólogo y director médico de VidaCel, doctor Alejandro Guiloff, explica que el método consiste en procesar tejido graso para obtener células madre que luego son inyectadas en zonas donde se requiera estimular la regeneración de tejidos. «La superficie del abdomen es la parte más sencilla y de muy buena calidad para extraer grasa rica en células madre. La capa que está más pegada a la piel es donde hay más vasos sanguíneos y, por ende, es mejor en células madre e irrigan muy bien ese tejido y se mantienen. En cambio, la grasa más profunda y más pegada al músculo tiene menos», agrega.

A diferencia de otras sustancias usadas en tratamientos estéticos, las células madre permanecen por largos periodos de tiempo actuando, permitiendo el retardo del envejecimiento . Además, la mezcla concentrada de tejido adiposo con células madre permite devolver al paciente un volumen tridimensional y entregar una mejoría muy importante en la calidad y lozanía de su piel. «El 70% del envejecimiento es por depresión volumétrica y las células madre con tejido adiposo es el relleno natural más solicitado en Italia, porque le devuelve a la piel su tonificación», cuenta el Dr. Sebastián Torres, master en Medicina y Cirugía Estética, médico chileno que trabaja hace más de 12 años en Roma, Italia.

«El botox solamente inhibe la conducción nerviosa y, por lo tanto, evita las arrugas por una detención en la actividad del nervio y tiene un tiempo de duración que no va más allá de 6 a 8 meses y sólo actúa a ese nivel. Lo mismo ocurre con el PRP o plasma rico en plaquetas, donde las proteínas secretadas ayudan transitoriamente, estamos hablando de unos 3 a 5 meses mientras persisten en las zonas donde uno las inyecta», señala el Dr. Guilof de VidaCel.

Las células envejecen con las personas y la mejor edad para guardarlas es la actual, ya que cada mes y año que pasa las células madre disminuyen en cantidad y en su calidad. Los cirujanos plásticos recolectan la grasa a través de una liposucción y el laboratorio la procesa para extraer las células madre, las cuales se guardan a muy baja temperatura para un posterior uso.

Para un rejuvenecimiento facial se necesitan alrededor de 50 a 110 cc de tejido adiposo para procesar y extraer células madre, a diferencia de una reconstrucción mamaria para una mujer que ha tenido cáncer. «Para una mejora volumétrica en pacientes de este tipo se necesitan de 150 a 200 cc por cada mama, porque hay que considerar un porcentaje de reabsorción. Estamos hablando de un aumento no muy significativo pero importante para una mujer», indica el Dr Torres.

Mediante mesoterapia, estas células madre son reinyectadas y el procedimiento se realiza en forma ambulatoria, es mínimamente invasivo, indoloro, con una tasa de rechazo cero y un resultado muy natural, y su duración dependerá de las zonas a rellenar.

No hay un estándar único de duración, pero se suele predecir que aquellos que toman sol, fuman, tienen una alimentación desordenada y no realizan ejercicios, envejecerán mucho más rápido.

«Los tratamientos con células madre en el área estética están partiendo en todo el mundo, su interés es creciente y es tema obligado en los congresos no sólo de medicina estética, sino también de medicina regenerativa», añade el doctor Torres.

El tratamiento prácticamente no tiene contraindicación, debido a que se trabaja con las células madre del propio paciente. «Son procesos muy simples y no tienen contraindicaciones, independiente que el paciente haya tenido algunas enfermedades crónicas y algunas graves», concluye el Dr Guiloff de VidaCel.