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Asencio José Dolce, médico cirujano plástico, recién llegado de un viaje en el exterior, mantuvo un diálogo con nuestro medio en el que se refirió a su estadía de más de un mes y medio en Europa, lugar donde ya había ejercido su profesión. En este sentido expresó que el viaje colmó sus expectativas. Asímismo nos habló de su especialidad y su experiencia en el campo de la cirugía plástica.

El doctor Dolce señaló que la situación en el Viejo Continente y particularmente en Italia es muy compleja, pero que apelando a sus años de historias podrán solucionar sus problemas. Refirió que en su viaje se encontró con propietarios de una cadena de centros de spa estéticos, con los que mantiene un contacto permanente, y quienes están posicionados como los más importantes del norte de Italia y para los cuales prestaba sus servicios profesionales.

Expresó que como médico argentino no puede desarrollar su profesión en Europa, que sería un acto ilegal y punible, pero que como posee además un título de médico italiano comunitario puede ejercer su profesión legalmente en cualquier país de la Comunidad Económica Europea y en países no comunitarios que hayan suscriptos convenios con la misma. Añadió que si bien no lo tenía previsto en este viaje, realizó algunos tratamientos quirúrgicos y no quirúrgicos con el material necesario que le proveyeron, y sostuvo también que volvería a ejercer su profesión allí. “Porque no, en la vida nunca se sabe, siempre me he sentido muy cómodo ejerciendo mi profesión en Europa”, resaltó.

Manifestó que su especialidad no se puede extrapolar entre Argentina y Europa ya que existen marcados diferentes con requerimientos específicos diversos, y que tampoco uno es mejor que el otro. Sostuvo que Argentina y Brasil son países con excelentes recursos humanos en cirugía plástica.

Dolce señaló que posee muchos años dentro de su especialización, que ya en cuarto año de medicina frecuentaba salas de cirugía para observar intervenciones quirúrgicas estéticas y reparadoras, sintiéndose convencido de que esa sería su futura actividad profesional. “Vi muchas cosas, de las buenas y de las malas”, expresó.

Contó que las cirugías estéticas no son riesgosas si se llevan a cabo siguiendo estándares de procedimientos homologados internacionalmente programados con el denominado a nivel internacional riesgo quirúrgico habitual donde su incidencia es prácticamente mínima. Respecto a los casos de muerte aseguró que en un alto porcentaje de los casos se han violado o no respetado las normas de procedimientos.
Entre dichas normas indicó que existen:

1-Escoger y reparar bien el paciente desde un punto de vista físico y psíquico, ya que no todos están en condiciones de recibir una intervención.

2-El profesional debe estar capacitado y tener la experiencia necesaria sobre la intervención a realizar.

3-La institución donde se llevará a cabo la intervención debe reunir requisitos mínimos e indispensables, como servicios de internación y terapia intensiva las 24 hs, exceptos en los procedimientos micro invasivos realizados bajo anestesia local.

Refirió que la mal llamada anestesia local más sedación, es en realidad una anestesia general endovenosa neuroleptoanalgesia, y que debe ser realizada por un anestesista en una institución que cuente con la infraestructura ante mencionada para que el paciente no se sienta desprotegido e indefenso.

4- En cuanto a los materiales a emplear, y en el caso de que se introduzca sustancias en el cuerpo humano biocompatible, las mismas deben estar certificadas y homologadas por organismos internacionales como FDA-ANMAT, etc., debiendo poseer trazabilidad y normas ISO entregando al paciente los certificados auténticos.

Con relación a los pacientes que fallecen en intervenciones indicó que se les ha inyectado sustancias no certificadas, ilegales, tratándose de población marginal o que en el mejor de los casos han sido engañados en su buena fe. “Es de esperar que no haya un colega involucrado detrás porque de ser así el daño y el desprestigio que le provocan a la especialidad bien ejercida es enorme”, remarcó. Agregó que posee gran experiencia en tratar de recuperar sustancias prohibidas en los tejidos pero que es técnicamente imposible y el desenlace fatal puede ocurrir en horas, meses o años dependiendo de algunas variables tales como las características de las sustancias, cantidad y volumen introducido, sitio de inyección, etc.

En este aspecto señaló que el componente más común es la silicona líquida industrial, y otras inimaginables, como vaselina sólida. Respecto a los implantes mamarios de origen francés PIP indicó que ya ha intervenido más de diez pacientes realizando la explantación bilateral donde dichos implantes no reunían las condiciones de homologación ante mencionadas. “Jamás me interesó estas cosas, primero está la bioética, quien los implantó consciente de la situación no merece respeto como profesional”, aseguró.

Dolce refirió también que ha participado en cirugías de cambio de sexo, en esa oportunidad la primera en el país, y aclaró que se trataba de un pseudohermafroditismo, y que el término de cirugía de cambio de sexo es incorrecto ya que no existe, no se cambia nada y se denomina genitoplastia adaptativa, o sea adaptar el sexo genita del paciente a su sexo psíquico. “Es importante no confundir travestis con transexual que son dos situaciones diversas”, agregó.

Asimismo refirió que el mercado masculino de las cirugías plásticas está creciendo, que es un fenómeno mundial, que las intervenciones no quirúrgicas más frecuentes son las terapias de reemplazo, llamadas comúnmente rellenos, depilaciones definitivas, etc, las quirúrgicas tales como las mamas, abdomen, facial, lipoescultura, cirugías íntimas, rinoplastias, etc, y las reparadoras, oncológicas, quemados, accidentología, etc.

Con relación a la colocación del cinturón gástrico, expresó que es un procedimiento muy útil en pacientes seleccionados que deberán luego de un tiempo realizar las cirugías plásticas adaptativas a su nueva situación morfológica corporal. Añadió que al paciente hay que escucharlo, saber cuál es su deseo, para luego evaluarlo y con las dos variables ofrecerle una propuesta capaz de solucionar su problema, mejorar su autoestima y su vida en relación con el supuesto de que ambas estén afectadas. “La experiencia te debe indicar a quien intervenir quirúrgicamente y a quien no, no es un tema menor, es muy importante”, expresó.

Fuente: cnsaladillo.com.ar