La cirugía de muslos gana terreno frente a las típicas operaciones de estética como el aumento de pechos o la rinoplastia.
La Cruroplastia es una intervención quirúrgica la cual se encarga de mejorar la forma y textura de los muslos los cuales por diversos factores genéticos, pérdidas de peso, cambios hormonales, etc. han ido perdiendo su belleza con el paso de los años.
Se trata de una intervención que pocos cirujanos plásticos ofrecen a día de hoy, aunque se espera que, debido al aumento de demanda, en unos años la oferta sea notablemente mayor.
Este tratamiento de cirugía estética se da debido a la flacidez y la pérdida de tersura de la piel por lo que se realizará una intervención de tracción cutánea teniendo en cuenta la anatomía y el grado de “descolgamiento” cutáneo de la o el paciente. Nuestro cirujano nos dará varias alternativas para obtener el mejor de los resultados.
Antes de realizar el lifting de muslos el cirujano estudiará las diversas posibilidades existentes antes de la operación siempre mediante el marcaje de las zonas a tratar.
Puede realizar incisiones en:
– La cara interna de los muslos cerca del llamado pliegue inguinal.
– Puede que la intervención requiera una mayor tersura por lo que sería necesario realizar las incisiones hasta los pliegues de los subglúteos.
– Dependiendo de la anatomía y del grado de flacidez de la piel que presente el paciente, puede que el cirujano opte por la opción de realizar la incisión semicircular.
Una vez realizadas las oportunas incisiones, la piel se traccionará en sentido superior y sentido medial para aportar la máxima tersura y confort posible a la piel del muslo, a la par que el tejido descolgado se eleva.
El especialista en cirugía reparadora realizará las incisiones en proporción a la cantidad de piel que sobre intentando siempre dejar el mínimo posible de cicatrices visibles realizando estratégicamente las incisiones en aquellas zonas de menor visibilidad.
Este tipo de cirugía es una alternativa muy atractiva para mejorar los resultados que se obtienen de una lipoescultura asistida con láser, para ayudar a remodelar el contorno corporal y en este caso el de los muslos.
Como en cualquier operación de extracción de grasa localizada, se dejaran puestos al paciente unos drenajes para evitar cualquier hematoma interno. Estos drenajes serán retirados al recibir el alta.
La duración de la cirugía de muslos es de aproximadamente dos horas y es realizada mediante anestesia general. Una vez finaliza la intervención las incisiones se suturan y se le colocan al paciente vendajes de comprensión para que la piel se vaya adaptando y para facilitar la cicatrización los cuales llevara durante dos días. A su vez se le colocará una faja de presoterapia en cada muslo que ayudará en la recuperación postoperatoria y que deberá llevar puesta durante 4 o 6 semanas. Tras la cirugía el cambio es sorprendente y las cicatrices, con el paso del tiempo, se atenúan.
Es esencial contar con la profesionalidad de un especialista en cirugía plástica y estética para que no solo nos de confianza y tranquilidad sino para que pueda resolver todas nuestras dudas sobre una intervención como ésta. La cirugía de Lifting de Muslos ayuda a tensar y remodelar la piel con flacidez aportando un mayor confort a la misma así como dotarnos de una adecuada calidad de vida ganando movilidad y flexibilidad.
Fuente: sunotadeprensa.com